El cineasta
y escritor Ramón Lluís Bande, nacido en Xixón en 1972, sigue explorando los
lenguajes de la no ficción con el estreno de una nueva película, Retaguardia,
que, tras tener su premiere internacional en FICMonterrey, de México, se estrenará en la Sección Oficial Albar del Festival
de Xixón, que se está
celebrando del 15 al 23 de noviembre de 2024.
Retaguardia culmina la Trilogía
republicana del artista, y como en los anteriores títulos del proyecto
-Cantares de la revolución y Vaca mugiendo entre ruinas-,
llega acompañado de un libro, Cuaderno de la Retaguardia, que
sigue a Cuaderno de la revolución, un recorrido por las palabras,
las canciones y los lugares de la revolución asturiana de 1934, la última
revolución proletaria de Europa Occidental; y Cuaderno de la
guerra, un pueblo en armas nunca fue vencido. Un recorrido por las
ideas, las palabras y las imágenes de dos meses de resistencia antifascista.
Edita la editorial Pez de plata.
Una
mirada creativa y documental a un momento crucial en la historia de las clases
populares asturianas
PORTADA DE "CUADERNO DE RETAGUARDIA"
Cuaderno
de la Retaguardia, guion expandido de la película Retaguardia (2024) que
firma el propio Ramón Lluís Bande, también guionista, director y montador de la
cinta, es un ensayo sobre la potencialidad de una cinematografía posible que
nunca existió. Se basa en un archivo, en una colección de películas de
propaganda del gobierno republicano asturiano de 1937. Así, Bande propone,
desde la teoría y la praxis, la arqueología de una posibilidad, aquella que
intenta dar respuesta a una pregunta: ¿cómo sería el cine de propaganda
rodado en la Asturies republicana de 1937?
En forma de
álbum gráfico, y a través de las fotografías de Constantino Suárez, textos de
autores como Ovidio Gondi, Juan Antonio Cabezas o Juan Manuel Vega Pico, los
dibujos de Goico-Aguirre o las pinturas de Nicanor Piñole, este libro investiga
y (re)construye, desde su virtualidad, ese cine en potencia. En estas páginas,
el cineasta apunta tres ideas para seguir desarrollando el discurso teórico en
el que apoyar los avances de su nueva película: en primer lugar, invocando a
Dmtry Vilensky, reivindica que no vale con hacer películas políticas, sino que
hay que hacer las películas políticamente. En segundo lugar, como defiende el
crítico francés Alain Bergala, Bande entiende que el cineasta honesto no
instrumentaliza el cine traduciendo las ideas, de las que ya está convencido,
en imágenes, sino que busca y piensa en el acto mismo de hacer la película. Y
para rematar, una confesión del cineasta rumano Radu Jude, que señala que el
caos y lo azaroso también pueden ser parte de una obra.
Retaguardia, una de esas películas que nunca
existieron
En el
documental especulativo Retaguardia, Bande investiga la
potencialidad del cinematograma para la puesta en pantalla de la (re)construcción
de una colección de películas de propaganda del gobierno republicano asturiano
en el año 1937, que si bien nunca existieron - o no llegaron a nuestros días -,
se podrían haber rodado, como muestran distintas evidencias y noticias de la época.
La película propone la arqueología de una posibilidad, al mismo tiempo que en
la pantalla, esa posibilidad, ese potencial, se transforma, ahora sí, en cine.
La intención de la película, explica su director, es “conseguir que tenga un
impacto (emocional, reflexivo, político), por pequeño que sea, en la vida de
las persones que la vean”.
La
posibilidad del cinematograma se basa en que, el 12 de agosto de 1937,
Aureliano Guerra Rivera, secretario de Cultura de la Agrupación Socialista de
Xixón, presentaba al Comité de su organización una propuesta para filmar una
película que recogiera “algunos aspectos de la guerra en la ciudad”. El Comité
aprobó hacer las gestiones necesarias con las diferentes consejerías de Consejo
Interprovincial de Asturies y León para que el rodaje se convirtiera en una
realidad.
La propuesta
señalaba algunos de esos aspectos de la guerra que tendrían que protagonizar el
metraje de la película: la zona destruida del cuartel de Simancas, los
edificios castigados por los cañonazos del Cervera, diferentes aspectos de la
actividad industrial, las actividades portuarias, los hospitales de sangre y la
vida escolar, reflejando también las clases en la playa y en el campo. Cuando
Ramón Lluís Bande encontró esta información en una noticia breve del
diario Avance se preguntó por el destino de aquella película.
¿Llegaría a rodarse? ¿Quiénes fueron sus responsables? ¿Existirá actualmente
alguna copia en algún sitio?
La historia
del cine está llena de películas que nunca existieron. Naum Kleiman, director
del Museo de Cine de Moscú, fue el primero en defender la necesidad de emplear
una metodología negativa para la reconstrucción del cine del siglo XX. El
espectador que quiera conocer la producción cinematográfica soviética de ese
tiempo, por ejemplo, tiene que contemplar en un plano de igualdad y análisis lo
mismo las películas que se hicieron como las que nunca llegaron a realizarse.
Partiendo de esa idea, Bande pretende (re)construir una colección de películas
que se pudieron rodar en Asturies durante el año 1937. Imaginar —con máximo
rigor documental, apoyado en evidencias de la época— un posible cine de
propaganda impulsado desde las instituciones y las organizaciones políticas y
sindicales republicanas asturianas y desarrollado por el equipo periodístico
del diario socialista Avance.
De ahí que
esta colección de películas que pudieron haber existido reciban el nombre de
Cine-Avance. Una película posible nunca realizada está cargada de potencial
(puede ser muchas películas diferentes) y virtualidad (es posible imaginarla de
todas esas formas). En el ensayo La Jetée de Chris Marker ou le cinematogramme
de la conscience, el teórico de cine francés Philippe Dubois inventa el
neologismo cinematograma. Si la noción de fotograma hace referencia a la
conversión en fotografía de una imagen de una película, la de cinematograma
designaría la imagen fotográfica transformada en filme. Como explica Antònia
Escandell Tur en su libro sobre la misma película (Chris Marker y La Jetée: La
fotografía después del cine), estaríamos hablando de un mecanismo formal que
opera en el ámbito del montaje cinematográfico “gracias a la conciencia del
espectador, encargado de restablecer el racor entre las imágenes de los
planos”. Por su parte, Walter Benjamin hablaba del carácter «viviente» de los
primeros retratos fotográficos.
Como ya se
refleja en Cuaderno de la Retaguardia, esta película
trabaja con las series de fotografías de Constantino Suárez y los textos de
Ovidio Gondi, Juan Antonio Cabezas o Juan Manuel Vega Pico. Intenta aportarles
la imaginación que les falta para convertirlos en las películas que quisieron
ser. La música de Sara Muñiz y la narración de Federico Volpini complementan la
cinta.
Sobre
Ramón Lluís Bande
Es cineasta
y escritor. Entre sus películas destacan títulos de no ficción como El fulgor
(2002), Estratexa (2003), De la Fuente (2004), El Paisano, un retratu colectivu
(2005), La carta de Bárbara (2007), Llende (2012), Equí y n’otru tiempu (2014),
El nome de los árboles (2015), Vida vaquera (2016), Aún me quedan balas para
dibujar (2017), Escoréu, 24 d’avientu de 1937 (2017), Cantares de una
revolución (2018), Vaca mugiendo entre ruinas (2020) o Contracampos (2022). Con
estos títulos participó en festivales como el Festival de Cine Europeo de
Sevilla –donde ganó el premio FIPRESCI en 2014–, Festival Internacional de Cine
de Gijón –donde ganó el Premio Especial del Jurado en 2018–, Buenos Aires
Festival Internacional de Cine (BAFICI), Festival Internacional de Cine de Mar
del Plata, Festival de Cine de Uruguay, Festival Cinema d’Autor de Barcelona
(D’A), DocumentaMadrid, Porto-Post-Doc, CinEuropa (Santiago de Compostela),
Festival de Cine de Las Palmas o Márgenes... En los últimos años creó y dirigió
varias series documentales para la televisión pública asturiana, RTPA, como
Camín de cantares (2007-2011), Camín (2012-2016), Ende (2012), Güelos (2014) o
L’alzada (2015). En el mismo canal dirige desde el año 2007 la revista
audiovisual de cultura asturiana, Pieces. Sus últimos libros publicados son El
paisaxe belixerante (Impronta, 2024) y Cuaderno de
la retaguardia (Pez de Plata, 2024).